Un paisaje en movimiento. Prácticas turísticas e infraestructura para el automóvil en Chile. 1902-1931

¿Cómo se transformó el territorio tras el arribo de los primeros automóviles a Chile? ¿Qué efectos tuvo la circulación de estos vehículos en la comprensión del espacio y en las ideas de paisaje? ¿Qué lugar comenzaron a ocupar los automovilistas en la sociedad? Este libro indaga en el acelerado proceso de modernización territorial y de transformaciones en los hábitos de la movilidad que significó la irrupción de los automóviles en Chile en las primeras décadas del siglo XX. Con el objetivo de comprender cómo se ejecutó la transformación material de los espacios de circulación, en este trabajo se estudia la articulación de las demandas por el mejoramiento de la vialidad efectuadas por las organizaciones de automovilistas, con el conocimiento técnico de la ingeniería civil y las definiciones políticas de un Estado que también se modernizaba y que buscaba dejar una huella material de esa transformación. La década de 1920 y especialmente la dictadura de Ibáñez marcaron un contexto favorable para la incorporación de nuevas tecnologías, entre las que se contaba el binomio automóvil-carreteras. Las nuevas políticas de vialidad permitieron la construcción de una red de caminos modernos que incidieron en la introducción de nuevas prácticas de movilidad mecánica ejercidas por los automovilistas. Desde entonces comenzaron a hacerse más frecuentes los viajes interurbanos y la búsqueda de nuevos destinos en los campos, las montañas o la costa, a través de infraestructuras que encarnaron el establecimiento de un nuevo paisaje en movimiento.